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Así habló Zaratustra
Libro

Así habló Zaratustra

Chemnitz/Leipzig, 1883 Mehr

Clásico de la literatura

  • Filosofía
  • Moderno

De qué se trata

La gran prédica del filósofo y poeta

“Dios está muerto”. Con esta frase, Nietzsche despojó al hombre moderno de la ilusión de la existencia de un ser superior que le da sentido al mundo. Ahora, el sentido debe crearlo el hombre por sí mismo. Si bien Nietzsche había coqueteado durante mucho tiempo con el nihilismo, es decir, con la idea de que no es posible ni necesario encontrar el sentido de la vida, en Así habló Zaratustra presenta por primera vez una obra capaz de brindar una orientación integral. Nietzche hace que el ermitaño Zaratustra (llamado así por un profeta persa) descienda de su montaña para anunciar sus enseñanzas a los hombres. Y transmite órdenes claras: no creas sin cuestionar, piensa por ti mismo, encuentra tu propio camino, no me sigas. En el centro está la idea del superhombre, al que todos pueden usar como referencia para superar la mediocridad, la credulidad y la moral barata, para crecer sobre la propia sombra, crear nuevos valores e, incluso, un nuevo mundo. El superhombre reemplaza a Dios en el objetivo de los esfuerzos humanos. Las palabras de Zaratustra son, por lo general, aforismos hímnicos, con formas expresivas, líricas. Aborda muchos temas relativos al sujeto moderno: el Estado, el matrimonio y la amistad, entre otros aspectos. El texto es, al mismo tiempo, poesía y filosofía. En la actualidad, es considerada la obra maestra de Nietzsche, en la que sus ideas alcanzan su momento cúlmine, aunque también se considera como el ocaso del filósofo, que más tarde perdería sus facultades mentales.

Resumen

Así habló Zaratustra

Zaratustra es un ermitaño que, tras muchos años de soledad y reflexión en solitario, abandona la montaña en la que vive para compartir con su sabiduría con la gente. En su camino, se topa con un sabio que encontró la felicidad con Dios en la soledad del bosque. Zaratustra se aleja rápidamente de él y se pregunta si el anciano no se ha dado cuenta de que Dios está muerto.

Al llegar a la ciudad, Zaratustra habla con la muchedumbre que se ha reunido en la plaza del mercado: “Les enseñaré sobre el superhombre”, propone. Para crearlo, el hombre actual, y por tanto, todo lo que existe, debe sucumbir. Es necesario superar la felicidad, la razón y la virtud.

Zaratustra considera que el conformismo es la mayor carga para la humanidad y un signo de mediocridad. Pero también la creencia en algo divino, es decir, en algo que está por encima de lo terrenal, no es más que un error. El superhombre descartaría todas estas cosas y, de este modo, alcanzaría un estado más elevado, poderoso.

La masa se burla de Zaratustra. Éste, entonces, ofrece otra opción frente al superhombre: el “último hombre”, un ser sin pretensiones...

Sobre el autor

Friedrich Nietzsche nació el 15 de octubre de 1844 en la ciudad sajona de Röcken. Su niñez se vio influenciada por el estricto protestantismo de la casa familiar, así como por la temprana muerte de su padre. En 1864 inició sus estudios de filología clásica en Bonn y luego se trasladó a Leipzig. Con tan solo 24 años, recibió un puesto como profesor en la universidad de Basilea. Su obra poco convencional, El nacimiento de la tragedia de 1872, generó tensiones entre sus colegas e hizo que se volcara a la filosofía. Sus Consideraciones intempestivas, escritas entre 1873 y 1876, nacieron bajo el influjo de Arthur Schopenhauer. Con el texto Richard Wagner en Bayreuth de 1876, Nietzsche creó un monumento conmemorativo de su amistad con el compositor. Pero, poco después, la amistad finalizaría, entre otras cosas, debido al interés de Wagner por el cristianismo.Con Humano, demasiado humano, de 1878, Nietzsche también se alejó de Schopenhauer. En 1879, renunció a su puesto en Basilea por un dramático empeoramiento de su estado de salud. Los siguientes diez años estuvieron marcados por diferentes crisis de salud, que trató de paliar con estadías en Suiza, Italia y Francia. Durante estos años aparecieron sus obras principales: Aurora (1881), La gaya ciencia (1882), Así habló Zaratustra (1883–1885), Más allá del bien y el mal (1886) y La genealogía de la moral (1887). En enero de 1889 sufrió un colapso mental en Turín: compadeciéndose de un caballo que había sido golpeado, lo abrazó y cayó luego en un desvarío mental. Se estima que había contraído sífilis. Murió el 25 de agosto de 1900 en Weimar. Tras su muerte y gracias a los esfuerzos de su hermana, se publicó La voluntad de poder, una colección inconclusa de aforismos que es considerada la obra principal de Nietzsche. En la actualidad, los investigadores consideran que muchos de sus textos son poco confiables, debido a las numerosas falsificaciones de su hermana. Ecce homo, la autobiografía de Nietzsche publicada en 1908, atestigua la última etapa creativa del filósofo, pero, también, su creciente megalomanía.


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